Tener swing con tus amigos significa no tener que lidiar con la molestia de encontrar a alguien nuevo para conectar sexualmente. Lo malo es que, son tus amigos y ese es un gran NO para muchas parejas swinger.
¿Es realmente una mala idea o solo una idea incomprendida? Encontrarás más respuestas que soluciones a esta interrogante. Por lo que, nosotros nos enfocaremos en mostrarte ambos lados de la moneda, con la mayor sinceridad posible. ¡Comencemos!
Contras de hacer swing con tus amigos
Para aquellos swingers a los que les cuesta socializar o son muy tímidos, hacerlo con amigos fuera del estilo de vida, puede ser una opción segura. El problema principal es que el estar fuera del ambiente, hace las cosas más complicadas. Habrá varios sentimientos involucrados para mal. Y esta es una lista de lo que puede salir mal.
Sentirse usado
Este es un gran obstáculo para muchas personas. Nadie quiere sentirse utilizado, incluidos tus amigos solteros. No es amable jugar con tus amigos solo para tachar tu lista de deseos sexuales.
No es inusual que las personas sientan que solo las quieres para acostarte con ellas, y es fácil que comiencen a malinterpretar que toda su amistad se basó en ti queriendo llevarlo a tu cama.
Celos o culpa
Hay muchas razones por las que alguien (especialmente alguien sin experiencia en el swing) podría tener una reacción emocional negativa ante la situación. Podría ser culpa por sentir que usó su estilo de vida para satisfacer su propia curiosidad, culpa por sentirse presionado por ti a ignorar su ética sexual, o culpa por haber albergado una atracción secreta durante años y finalmente actuar en consecuencia sin confesarlo.
También es común que los amigos sientan repentinas punzadas de competitividad o una sensación de insuficiencia en cuanto a su físico y/o destreza sexual. Imagínate comparándote con tu amigo de toda la vida sobre quién tuvo más resistencia con tu esposa, no sonará agradable para muchas parejas.
Diferentes niveles de perversión
¿Qué pasa si a tu amigo le gusta algo realmente pervertido? ¿O qué pasa si está en contra de cualquier cosa remotamente pervertida? Podría ser tan simple como decir algo incorrecto en la cama. Frases como “sí, papi, sé rudo” pueden ser muy excitantes para algunos y tan ofensivo para otros.
Son diferentes estilos para diferentes personas. La verdad es que tú y tus amigos pueden ser emocionalmente compatibles y sentirse atraídos el uno por el otro, pero eso no significa que serán sexualmente compatibles.
Simplemente, perder la amistad
Recuerda que, junto con todo lo mencionado anteriormente, también existe la posibilidad de que tú y tus amigos vainilla no se sientan cómodos estando juntos después de que se hayan intercambiando parejas.
No esperes madurez de toda la gente a tu alrededor. Nunca se puede predecir realmente cómo reaccionará alguien, comprende que existe la posibilidad de perder la amistad para siempre.
Riesgo de privacidad
Quizás estés pensando que hay menos riesgo al hacer swing con amigos porque ya confías en ellos. Hay algunos detalles aquí. Primero, pueden ser tus amigos hoy, pero no sabes si lo serán para mañana. Si alguna vez se distancian, es posible que filtren tu secreto. Incluso si son 100% confiables, los accidentes ocurren.
Es posible que se emborrachen demasiado o que las personas equivocadas los escuchen. Si tus amigos hablan con otras personas de tu vida, siempre existirá la posibilidad de que tus aventuras de swing sean de conocimiento público. Una mejor manera de cuidar tu privacidad es compartimentar tu diversión swing lejos de tu vida vainilla. Los amigos no son tu única opción. Hay muchas formas de encontrar parejas interesadas en el swing.
Ventajas de hacer swing con tu amigos
Si todavía no desistes de la idea de proponerle a tu amiga de la universidad intercambiar esposos por una noche, no te vamos a detener, solo a aconsejar porque en eso somos buenos. Lo que sí te recomendamos es que te prepares adecuadamente para todo el proceso, y que te dejes guiar por las ventajas más evidentes de esto:
Mucha confianza
Como ya son tus amigos, es probable que hayan demostrado respeto por tus límites y tus necesidades. También son capaces de saber cuándo estás nervioso. Además, si te preocupa tu seguridad, hacerlo con gente conocida será más seguro que hacerlo con un extraño.
Tienes que asegurarte de haber hablado antes con tus amigos sobre tu estilo de vida, y confirmar que no tengan prejuicios de ti o tu pareja. No esperes que alguien a quien no le agrada los swingers te vaya a seguir respetando al proponerle algo así.
Sin secretos
Es muy probable que conozcas el pasado sexual de tus amigos y ellos conozcan el tuyo. Conocer las preferencias y gustos de los otros, es bueno para hacer crecer la química en la cama. Ambas partes son muy importantes.
Una fantasía más
Puede que siempre hayas tenido una fantasía con ese amigo o esa amiga desde hace mucho tiempo. Y al confesarla, ellos estén entusiasmados con la idea. No tienes que ser swinger para tener la fantasía de un trío o de intercambiar parejas para estar con alguien más, o que tu esposo/esposa te vea con alguien más.
Para ellos es una fantasía más que tú podrás acercarles. La realidad es que hay amistades convencionales que sobreviven a tener sexo entre ellas siempre y cuando todos sean muy maduros con el tema.
Antes de la propuesta
Antes de mencionar algo, debes asegurarte de que esto no incomode a tus amigos. Puede ser una conversación muy incómoda en las peores circunstancias. Debes considerar quizás tus amigos no estén interesados en algo como esto en general o en ti o tu pareja específicamente.
Entonces, antes de pedirle a alguien que se una a ti, tienes que confirmar que sea una buena propuesta. Puedes hacerlo mencionando que tú y tu pareja están considerando hacer un trío. Si reaccionan de manera positiva, pregúntales si alguna vez lo han hecho o si alguna vez estarían interesados.
Si dicen que sí, no te apresures a hacerles proposiciones. Considera cuidadosamente la vibra que estás captando de ellos. Es aconsejable dejar pasar algunas noches para asegurarte de no apresurarse. Si parecen abiertos y has decidido que vale la pena correr el riesgo, entonces es hora de conversar honestamente sobre lo que estás preguntando y lo que tú y tu pareja tenéis en mente. Mencionarlo de manera casual te permite evaluar sus reacciones.
Acodar los detalles del encuentro
Cuando sientas que has encontrado a alguien que no solo será una buena adición a tu dormitorio sino que también crees firmemente que te sentirás cómodo con este, ¡es hora de dar el siguiente paso!
Cuando decidas que te gustaría hacer swing con un amigo, sé abierto y honesto al respecto. Diles la verdad sobre tus intenciones y lo que esperas. Hablen de todos los puntos que te facilitaremos a continuación:
Establecer límites y expectativas
Suponiendo que la pareja de amigos estén interesados, es importante hablar sobre lo que todos deberían esperar. ¿Estás esperando compañeros de juego a largo plazo? ¿Estás esperando una aventura de una noche? ¿Hay algo prohibido para ti o para ellos?
Pregúntate a ti mismo, y a los demás qué se puede o no se puede permitir en esta situación. Habla abiertamente sobre tus necesidades.
Además, discute lo que sucederá después de la diversión. ¿Dónde tus amigos o amigo pasará la noche? ¿Desayunarán por la mañana juntos? Esta conversación debes tenerla en privado con tu pareja, después con los demás.
Comunicarse es importante
No hace falta decirlo, pero la comunicación es clave aquí. Tú y tu pareja deberían haberse comunicado sobre todo antes de siquiera considerar hablar con un amigo sobre la posibilidad de jugar. Aun así, es importante reevaluar tus elecciones a medida que avanzan las cosas tanto con tu pareja como con tu amigo.
También puede ser más fácil hablar con tu amigo a solas antes de que hablen todos juntos. Todos deben sentirse cómodos. Esto debe continuar durante y después del sexo.
Después del encuentro
Es esencial asegurarte de continuar tratando la amistad con el mismo respeto que tenían antes. Y recuerda que incluso meses después, alguien todavía puede empezar a cuestionar lo que una vez pasó. Tú y tu pareja tienen que estar preparados para todo tipo de escenarios.
Salir con amigos es complicado y, a menudo, es más fácil encontrar otras personas que ya estén en la comunidad que arriesgar una relación existente. Pero si te tomas el tiempo para ser cuidadoso, respetuoso y afectuoso, es posible tener una amistad exitosa después de una noche (o más) de diversión compartiendo una cama.