Los malentendidos, la falta de comunicación y no saber detectar a las parejas problemáticas, todos estos pueden ser desencadenantes de una mala experiencia haciendo swing. Nadie quiere malas experiencias cuando se convierten en swinger, es al contrario, se quiere vivir sin miedo a ser juzgados en un ambiente seguro.
Pero la realidad es que algunas veces tu nivel de seguridad en el estilo de vida swinger estará determinado por qué tan bueno seas cuidando de ti mismo y de tu pareja. ¡Evita los siguientes peligros para hacer de tus experiencias las más placenteras posibles!
Romper la confianza de alguien
Ya has hablado de todo, te sientes seguro y protegido en tu relación y estás disfrutando del estilo de vida swinger. Y después descubres que tu pareja tuvo un encuentro privado del que tú no sabías nada. ¿Quién era ella? ¿La conociste? ¿Que hicieron? ¿Usaron protección?
El peligro número uno del swinging es que alguien rompa la confianza de su pareja. Esta única acción puede hacer retroceder significativamente la relación e incluso puede resultar en una separación.
El swing tiene que ver con la confianza, y romper esa confianza puede destruir la relación para siempre. Para evitar este error, es una buena práctica preguntarle a tu pareja cuánta información quiere saber sobre tus aventuras y decirle cuánta necesitas saber tú.
Una vez que haya establecido reglas, asegúrate de cumplirlas. Si descubres que ya no le gustan las reglas, habla con tu pareja para revisarlas en lugar de romperlas.
No comunicarse correctamente
Ya sea que no expreses tus preocupaciones sobre los celos o no comuniques tus límites con claridad, estas cosas seguramente saldrán a la luz en una discusión acalorada.
Habla sobre las cosas a medida que surjan o reserva un espacio de tiempo donde los dos estén calmados, para hablar. No hablar de los temas difíciles puede provocar que se agraven los problemas en tu relación.
Esperar que el swing arregle tu relación
El swing no es una forma de arreglar una relación. Al igual que cualquier otra decisión importante en la vida, como mudarse a vivir juntos o tener un bebé, hacer swing puede crear un estrés increíble en una relación. Las personas que han intentado hacer swing cuando su relación estaba en problemas rara vez tienen algo positivo que decir sobre la experiencia.
En su lugar, considera al swing como una forma de mejorar tu relación, no para llenar las grietas. De lo contrario, es posible que todo se dañe.
No poner límites
Sin límites, probablemente te sentirás perdido e infeliz con bastante rapidez. No podrás borrar la imagen de tu pareja con otra persona, por eso lo mejor es asegurarte de que es algo que sí deseas.
Como no quieres que tus primeros eventos divertidos de swing se arruinen por el arrepentimiento, establece exactamente hasta dónde estás dispuesto a llegar con otras personas y hasta dónde estás feliz de que llegue tu pareja. Y hablar de ello.
Jugar con la gente equivocada
Ya sea que no tengan suficiente experiencia o les gusten cosas diferentes, a veces simplemente no funcionará con todas las parejas con las que lo intenten. Lo que es más preocupante es que puedes conocer gente que no respeta tu relación ni tu consentimiento. Tan pronto como notes esto, es mejor seguir adelante lo más rápido posible.
Puede causar tensión entre vosotros si sientes que son las personas equivocadas y tu pareja no está de acuerdo contigo. Pero siempre que comuniques todo esto, solo debería ser un pequeño obstáculo en el camino.
Tomar las cosas demasiado rápido
Ambos se han dado cuenta de que su máxima fantasía es un cuarteto con buenos amigos. ¡Excelente! Así que te tomas unas copas de vino y te metes en la cama. Si bien esto funciona para algunos, para la mayoría de las personas no pasará mucho tiempo antes de que el arrepentimiento llegue.
Apurar las cosas significa menos tiempo para establecer confianza, límites y una conexión con las personas con las que juegas.
No es posible tomar las cosas demasiado despacio, pero sí se puede tomar las cosas demasiado rápido. Ten esto en cuenta cuando abras tu relación por primera vez o cuando comiences a explorar cosas nuevas dentro del swing.
Tener dificultades para encontrar socios
El swing no es exactamente como en las películas: no habrá un suministro interminable de parejas sexuales. Se necesita tiempo para encontrar personas y aún más para encontrar a las personas adecuadas para ti. Pero si mantienes la mente abierta, asistes a diferentes eventos y pruebas, encontrarás a tu gente.
Puede causar problemas en la relación centrarse demasiado en encontrar a otras personas, así que deja que las personas adecuadas se acerquen a ti. Te sorprenderá dónde los terminarás encontrando.
No discutir los riesgos con todos los socios
Es esencial asegurarse de que todos estén en sintonía y que nadie esté a punto de contraer una ETS sin saberlo. También es importante ser sincero acerca de la prevención del embarazo y tener una idea realista sobre lo que sucedería en esa situación y qué medidas tomarías.
Muchos swingers también están preocupados por su privacidad, así que asegúrate de que quede establecido que lo que sucede en el dormitorio se queda en el dormitorio. Puede que no te importe que todo el mundo se entere de tus nuevas escapadas, pero otras parejas pueden ser mucho más privadas y podría poner en riesgo su trabajo o su vida familiar.
En resumen, casi todos los obstáculos se reducen a la comunicación. Sabemos que estamos empezando a sonar como un disco rayado, pero no podemos enfatizar lo suficiente lo importante que es hablar honestamente unos con otros.